SENILLOSA (ED) — Las tierras municipales que fueron usurpadas en la localidad neuquina de Senillosa estaban (en rigor, están) destinadas a familias que se habían anotado en los planes correspondientes y que ahora miran con angustia cómo se convirtieron en una toma.
Los usurpadores (alrededor de un centenar de familias) ya se instalaron y exigen que les den tierras. Fuentes del municipio dijeron a este medio que efectivamente los terrenos del barrio CH3, cuya toma comenzó durante el último fin de semana, “están destinados a otras familias” y agregaron que “todos esos terrenos tienen un destino”.
Es precisamente por eso que la administración que conduce la intendenta Patricia Fernández no se puede comprometer con la entrega, pero en cambio inició una mesa de diálogo y la recepción de carpetas de las familias.
Las carpetas sirven para despejar dudas respecto de posibles especuladores (e instigadores) que se suman para tomar terrenos y luego venderlos, como ya ha ocurrido en otras ciudades.
Fuentes consultadas por este medio dijeron haber reconocido a activistas de los gremios ATE (de los trabajadores del Estado) y ATEN (de los docentes) acompañando el reclamo en la toma.
Desde el municipio dijeron que no desconocen el problema habitacional, pero subrayaron que esa no es la forma de reclamar.
